La acumulación de hollín y creosota no solo reduce la eficiencia de tu chimenea, sino que también representa un riesgo significativo de incendio. Al realizar un deshollinado regular, puedes prevenir estos problemas y disfrutar de un ambiente seguro en tu hogar. Nuestro equipo realiza un deshollinado completo y detallado, ideal para chimeneas de leña, gas y otros sistemas de calefacción.
01. Inspección Inicial
Realizamos una inspección previa para evaluar el estado de tu chimenea y la cantidad de residuos acumulados. Esto nos permite adaptar el proceso para lograr los mejores resultados.
02. Limpieza Completa
Utilizamos equipos avanzados para eliminar hollín, creosota y otras obstrucciones. Nuestro equipo asegura que todas las áreas críticas de la chimenea, incluido el conducto de humo, queden limpias y despejadas.
03. Verificación de Seguridad
Tras completar el deshollinado, realizamos pruebas para verificar el flujo de aire y la seguridad de la chimenea. Este paso asegura que tu sistema de calefacción esté listo para usarse sin riesgos.
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¿Listo para asegurar el buen funcionamiento de tu chimenea?